Colectivos de agentes humanos

La gerencia es consciente de que las personas en todas las organizaciones están buscando enérgicamente nuevas técnicas y tecnologías dentro de sus dominios específicos de experiencia. Pero, ¿se suma a una estrategia que continuará contribuyendo a un entorno donde los ahorros son cada vez más difíciles de alcanzar y donde la calidad y la productividad están siempre bajo presión para mejorar?

Los líderes mineros innovadores buscan cada vez más las tecnologías avanzadas relacionadas con la inteligencia artificial (IA) para obtener respuestas. De hecho, el campo de la inteligencia artificial y el machine learning está comenzando a reconfigurar el sector minero, en la planificación y las operaciones. Maptek se ha convertido en un líder establecido en esta área.

No se trata solo de adoptar las últimas tecnologías. El verdadero éxito viene al desarrollar una cultura organizacional que intercala personas y computadores en formas profundamente nuevas.

Nicholas Jennings, un científico informático líder, ha sido clave para el desarrollo de la ciencia de Colectivos de Agentes Humanos (CAH) en el que los humanos y los agentes de software colaboran de manera transparente. Dice que hasta la fecha, el enfoque ha estado en sistemas donde todos los agentes son software o hardware.

“El control centralizado ya no es posible. El volumen, la variedad y el ritmo de la información y los servicios se han vuelto demasiado grandes”. – Nicholas Jennings

Jennings ve que “es necesario y beneficioso involucrar a los seres humanos, trabajando como recolectores de información activos y procesadores de información, en armonía con agentes de software autónomos”.

Esto tiene implicaciones para las empresas mineras, que cuentan con una amplia gama de recursos, incluidos miles de trabajadores. Las operaciones necesitan administración, pero, paradójicamente, la administración también necesita la capacidad de ejecutarse de manera autónoma. A través de CAH, las minas pueden descubrir el comportamiento emergente por sí mismos, el comportamiento de un sistema que no depende de sus partes individuales sino de sus relaciones.

La optimización en tiempo real de la mina con control de leyes, programación a corto plazo y gestión de necesidades de reconciliación para analizar datos y reaccionar contra patrones destructivos y procedimientos establecidos, y potencialmente crear formas emergentes positivas para resolver problemas y desarrollar nuevas técnicas.

Las técnicas lineales para el análisis de datos a la fecha deben ser reemplazadas por agentes con enfoques no lineales para la resolución de problemas, utilizando técnicas avanzadas de deep learning.

Un ejemplo de aprendizaje mejorado humano-computador es el twinning digital. Un modelo virtual se alimenta de datos en tiempo real desde el campo; los escenarios pueden probarse rápidamente, y las operaciones y la producción pueden optimizarse. Las pruebas de evaluación previa de personas y activos en un sistema de réplica conducen a mejores resultados.

Para las compañías mineras, CAH puede revelar tres oportunidades escondidas a simple vista. Primero, una historia en crecimiento que le permita a una mina aprender sobre sí misma. En segundo lugar, los agentes inteligentes rastrean todos los datos históricos operacionales y almacenados en vivo en busca de variaciones y oportunidades. En tercer lugar, la negociación colaborativa entre agentes y personas.

Los CAH prometen a las empresas mineras, grandes y pequeñas, mejoras en los rendimientos, la velocidad y la eficiencia. ¿Qué se necesitaría para tener un gran impacto? Maptek sostiene que los diversos elementos de CAH requieren de:

• Comprender cómo proporcionar una autonomía flexible que permita a los agentes a veces tomar acciones autónomas sin hacer referencia a las personas, mientras que otras veces se guían por una participación humana más cercana.
• Descubrir cómo los grupos de agentes y humanos pueden exhibir equipos ágiles y unirse para lograr objetivos conjuntos, disolviéndose una vez que la acción cooperativa ha tenido éxito.
• Elaborar los principios de la ingeniería de incentivos en los que se diseñan las recompensas de manera que se aliente a las acciones que los participantes toman para generar resultados socialmente deseables.
• Diseñar una infraestructura de información responsable que permita confirmar y auditar la veracidad y precisión de las decisiones humanas y de los agentes, los datos de los sensores y el contenido generado por la multitud.

Estas no son áreas completamente nuevas. Sin embargo, el contexto CAH introduce una complejidad adicional y trae nuevos elementos a un primer plano. Según Jennings, el control centralizado ya no es posible. El volumen, la variedad y el ritmo de la información y los servicios se han vuelto demasiado grandes’.

El cambio es inevitable. Las empresas mineras deberán adoptar esto para sobrevivir en nuestro entorno extremadamente competitivo.